sábado, 17 de mayo de 2008

La Filosofía Judicial de John McCain

El pasado 6 de mayo el candidato republicano John McCain dió una plática en la Universidad Wake Forest acerca de su filosofía judicial. El asunto no ha sido profundamente revisado por los editorialistas y columnistas, si acaso el New York Times dedicó una editorial a llamar la atención sobre éste asunto, pero en realidad hasta hoy no he leído nada al respecto. Ayer, la Corte Suprema de California declaró inconstitucional la ley que prohibía el matrimonio a parejas homosexuales poniéndo en el centro del debate electoral el tema del matrimonio gay, lo que lleva, consecuentemente, a llamar la atención sobre la necesidad de conocer la visión que cada candidato tiene del Poder Judicial y del significado de la Constitución.

El debate sobre la interpretación constitucional en los Estados Unidos puede dividirse en dos grandes grupos: interpretivism y non-interpretivism (que podrían traducirse como interpretación restringida o textual e interpretación extensiva o sobreinterpretación). Éstos dos modelos son cruzados transversalmente por el activismo y el self-restraint. Según J. Hart Ely, ésta dicotomía revuelve el clásico debate entre positivismo y iusnaturalismo, pues interpretivismo es casi lo mismo que positivismo, mientras que un acercamiento iusnaturalista, sería casi lo mismo que una interpretación extensiva. Esto quiere decir que no hay únicamente dos visiones encontradas, sino que, como las visiones políticas, la interpretación constitucional puede irse graduando dependiendo del enfoque y el activismo. Así se ha hablado sobre originalismo (Scalia), estricto construccionismo, textualismo, activismo, doctrina de la Constitución viviente (Posner), etc. Con ésto quiero decir que un juez conservador no necesariamente es un juez que sostenga una interpretación textual y restringida, pues puede tratarse de un juez que quiera prohibir, por ejemplo, el matrimonio entre dos personas del mismo sexo, entonces interpretará la Constitución de manera extensiva (pues ésta no dice nada sobre el matrimonio) y por lo tanto estará expandiendo el contenido normativo de la Constitución, lo que puede calificarse de activismo judicial. Al revés, podría decirse del juez que expandiendo el contenido de la Constitución, interpreta de manera extensiva un artículo, por ejemplo, la enmienda XIV reconociéndo en ésta el derecho de las mujeres a abortar. Así, un lado acusa al otro de ser activista y sobrepasar los límites marcados por el Constituyente, dependiendo de la filosofía de cada uno.

Cabe señalar que es probable que al próximo Presidente de los Estados Unidos le toque nombrar a algún ministro de la Suprema Corte. El Ministro Stevens tiene 88 años, los Ministros Kennedy y Bryer rondan también los 80 y la Ministra Bader tiene ya 75. Hace unos años se discutió acerca de la duración del cargo de Ministro, pues es vitalicio, con posibilidad de renuncia y hoy presenta dificultades, pues evidentemente, cuando el Constituyente planteó la duración del cargo como una garantía de autonomía, nunca esperó que un juez durara 30 años -o más- en la banca. El debate fue provocado por la nominación de dos Ministros que recayó en la Administración Bush. En 2005 murió el Ministro Presidente William Rehnquist (Chief Justice), y unos meses antes, la Ministra Sandra Day O´Connor presentó su renuncia por motivos personales. Esto abrió la puerta al ala conservadora republicana de nominar a dos nuevos Ministros: Samuel A. Alito Jr. Y John G. Roberts Jr. Ambos Ministros fueron ratificados por el Senado, sin que esto significara que los senadores, y sobre todo los más liberales, estuvieran de acuerdo. Tanto Hillary Clinton, como Barack Obama, expresaron su desacuerdo en la nominación de ambos. Especialmente respecto del Ministro Alito, dado su récord conservador y contrario a la Ministra Day O´Connor a quien sustituiría.

En su plática, John McCain destacó el papel de la Constitución, como límite a los poderes del Estado y como control de la división entre éstos con un sistema de pesos y contrapesos que no debe ser violentado. Criticó a las Cortes Federales por “abusar sistemáticamente de su poder de revisión constitucional interpretándo la Constitución de manera excesiva", pues, dijo, "han resuelto asuntos que no están regulados en la Constitución, y que deberían resolverse mediante el proceso democrático”. Mencionó también, que las Cortes deben aplicar la Constitución y que su autoridad moral depende de la propia restricción (self restraint)al interpretarla e intervenir en asuntos políticos, pues ésta –su autoridad moral- se desvanece cuando una Corte pretende crear la ley en lugar de aplicarla. El candidato criticó las últimas decisiones de la Corte de Rehnquist, como la confirmación de la expropiación decidida en Kelo v. City of New London y que McCain considera violatoria de la propiedad privada, o el controvertido caso de homicidio agravado en Missouri, en donde la Corte resolvió bajar la pena aplicándo el método comparativo, entre otros argumentos, que McCain considera a-constitucionales. Sobre la separación del Estado y la Iglesia, McCain critica duramente al Juzgado del Noveno Circuito por haber considerado inconstitucional el uso de “bajo Dios” en el juramento de lealtad (Pledge of Alliegiance) y advierte que se prepara una demanda para remover de los billetes la frase “In God we trust”.

Todo esto, considera el candidato, son abusos que caen dentro del activismo judicial. Para él, el activismo debe ser democrático, practicado por los políticos, los legisladores, los candidatos, no los jueces. Pues en el momento en que un juez utiliza éste método para interpretar la Constitución, se pierde entonces la certeza y la seguridad y se viola el Estado de Derecho (rule of law). Pero volvemos a lo que decía arriba, desde qué punto de vista mira uno el activismo, pues la Constitución preveé la separación del Estado y la Iglesia en la primera enmienda y la expropiación por causas de utilidad pública en la quinta.

La segunda crítica la dirige al Senado, especialmente a la Comisión Jurisdiccional encargada de ratificar los nombramientos de los jueces federales. Entre otras, menciona el partidismo que existió cuando los nombramientos más recientes a la Suprema Corte, y es que durante ambos nombramientos, un grupo del Senado amenazó con bloquear las reuniones. 22 Senadores votaron en contra de Roberts. McCain reprocha a Obama haber dicho que votaba en contra del ahora Presidente de la Corte, porque un Ministro debe “compartir los valores más profundos de uno, las preocupaciones, las perspectivas de cómo funciona el mundo y la profundidad y amplitud de la empatía de uno”. McCain dice que él, aprobó sin más a los nominados de Bill Clinton: Stephen Breyer y Ruth Bader Ginsberg, pues considera que ésta es, de acuerdo con la Constitución, una facultad del Ejecutivo y que se debe respetar su buen juicio sin partidismo o protagonismo. Y es que dice que muchos senadores interpretan los desacuerdos como descalificación para ocupar la banca, pues es parte de la disciplina de la democracia respetar los roles y las responsabilidades de cada rama del Gobierno, y sobre todo, los verdictos de las elecciones y el juicio del pueblo.

McCain adelanta que en caso de llegar a la Presidencia y le toque nombrar a jueces o en su caso, ministros, llamará a personajes que piensen, sientan y opinen como los Ministros Alito y Roberts, pues dice “mis propios estándares de habilidad judicial son la experiencia, la filosofía y el temperamento, y tanto el Chief Justice Roberts, como el Justice Alito cumplen con ellos en todos los aspectos...Buscaré hombres y mujeres que tengan un récord probado de excelencia bajo la ley y que tengan un compromiso comprobado con la restricción judicial (judicial restraint). Buscaré juristas de la talla de Roberts, Alito o Rehnquist. Mis nominados deberán comprender que hay límites claros al poder judicial y límites claros al enfoque del poder federal... Ninguna regla aplica excepto la regla de derecho (rule of law), y no se debe servir a otro interés, más que al interés de la justicia”. Y ¿Qué es la Justicia John McCain?

La Corte Roberts (Casos durante la Corte Roberts) se ha caracterizado por dar pasos, grandes, hacia el ala más conservadora. En lo que va del mandato de Roberts, la Corte ha echado abajo precedentes como Brown v. Board of Education, que en 1954 terminó con la segregación racial en las escuelas públicas, permitió que se censure la libertad de expresión en escuelas oficiales, facilitó a los fiscales para remover jurados potencialemente ambivalentes en casos de pena de muerte, declaró constitucional la inyección letal, consideró constitucional la ley de Indiana que requiere una identificación para votar, y en general sus decisiones han favorecido a los grandes intereses. La Corte ha sido criticada por su conservadurismo y se preveé que durante la presidencia de Roberts se echen abajo precedentes como Roe v. Wade (aborto) y se decidan asuntos como el del matrimonio homosexual.

Lo que más llama la atención es que McCain criticó tanto al Poder Judicial, como al Senado, por abusar de las facultades que les otorga la Constitución, pero nunca mencionó a quién más ha abusado de éstas facultades, las ha violentado hasta desfigurar el Estado Constitucional que los fué diseñado a finales del XVIII: George W. Bush.
Ni tampoco dijo, si reestablecerá las libertades en ese país, si buscará que se respete el derecho al debido proceso, si la tortura seguirá siendo un método legal, si Guantánamo debe continuar operando, si se dejará de discriminar por razón de nacionalidad o religión, o si respetará la división de poderes, mientras tanto queda pendiente la definición del candidato republicano sobre cuál es su filosofía sobre las libertades y si él, como Presidente, se dignará a respetar la Constitución.

Geraldina González de la Vega
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Información el Chief Justice Roberts:
Perfil de Roberts, Respuestas Roberts al Comité del Senado,Opinión de Roberts sobre Judicial Restraint